Es un hecho que cada vez pasamos más tiempo delante de las pantallas de nuestros telefónos móviles, ordenadores y tabletas. Si no , mira a tu alrededor, seguro que ves a alguien atento a una plantalla, grande o pequeña, incluso en la piscina, el chiringuito o en la playa.
El uso abusivo de las nuevas tecnologías ha originado la aparición de numerosas y nuevas enfermedades, enfermedades hasta ahora adesconocidas como «el dedo de Blackberry».
Además ha incrementado los diagnósticos de miopia, vista cansada o lesiones cervicales a causa de malas posturas.
Estar horas y horas ante el ordenador o el móvil nos amenaza con desconectar del mundo real, poniendo de manifiesto vacíos afectivos, puntos ciegos de carácter y de reprogramación de nuestros miedos y neurosis, de nuestras dependencias e incapacidades.
Sherry Turkle, profesora del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), asegura que esta tendencia supone “un verdadero problema tanto en la manera de relacionarnos con los demás como con nosotros mismos». La psicóloga considera que, a pesar de las infinitas posibilidades que brinda la tecnología, ésta acaba erosionando la capacidad para estar solos, de tal forma que “buscamos a los demás únicamente para no estar solos, no para crear lazos verdaderos”.
Este problema afecta, sobre todo, a los “nativos digitales”, ya que han crecido interactuando con móviles inteligentes frente a los cuales experimentan problemas para el autocontrol del tiempo que dedican a las nuevas tecnologías, según apunta el psicólogo Alfredo Oliva. El resultado: una adicción patológica cuya única cura, a juicio de los expertos, está en el afecto y control de los padres.
Las nuevas tecnologías desarrollan además en nosotros fantasías como sensación de omnipresencia, atención 24 horas y la creencia de no estar solos. De este modo, el no tener acceso a ellas genera ansiedad y pánico. Basta con observar situaciones cotidianas como la caída del servidor de WhatsApp[1] hace algunos meses, con el consiguiente revuelo y alteración de sus usuarios.
Los principales problemas de salud producidos por un uso tecnológico excesivo son:
Fuentes: Marketing Directo/ABC.com
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Un tema muy interesante… Es necesario conocer los efectos negativos de las cosas, para poder poner remedio y evitar que nos perjudiquen, incluso antes de que ocurran.
Espero que os guste. Un saludo Silvia