Científicos identifican nuevos genes relacionados con la grasa abdominal
La pregunta que nos hacemos constantemente de por qué la grasa se almacena » siempre» en la zona abdominal, tanto en ellas como en ellos, podría tener respuesta.
Los investigadores han identificado cinco genes nuevos vinculados con la grasa abdominal y afirman que sus hallazgos podrían ayudar en los esfuerzos por desarrollar fármacos para tratar la obesidad o las enfermedades relacionadas con la misma.
En la investigación se observaron a más de 57.000 personas de ascendencia europea, y buscaron los genes asociados con la grasa abdominal, independientes de la obesidad general. Examinaron más de 50.000 variantes de 2.000 genes.
El equipo halló tres nuevos genes asociados con un aumento en la proporción entre cintura y cadera tanto en mujeres como en hombres, e identificaron dos genes más que parecen afectar la proporción entre cintura y cadera solo en las mujeres. La proporción entre la cintura y la cadera se utiliza para medir la grasa abdominal de una persona. Se cree que la genética explica entre el 30 y el 60 por ciento de la proporción entre cintura y cadera.
La grasa abdominal es un predictor de las enfermedades relacionadas con la obesidad, según los Centros para el Control y la Prevención de las Enfermedades (CDC) de EE. UU.
El nuevo estudio halló que de los dos genes que parecen afectar solo a las mujeres, uno conocido como SHC1 parece interactuar con 17 proteínas más que se sabe que tienen un rol en la obesidad. Se halló que el SHC1 es altamente activo en tejido graso.
«Es la primera vez que el SHC1 se ha asociado con la grasa abdominal», aseguró en un comunicado de prensa de la Universidad de Louisville la autora del estudio, Kira Taylor, profesora asociada de la Facultad de Salud Pública y Ciencias de la Información de la universidad.
«Creemos que este descubrimiento representa una gran oportunidad para la química médica, y al final, para la medicina personalizada», aseguró Taylor. «Si los científicos pueden hallar una forma de refinar la [actividad] de este gen, podríamos potencialmente reducir el riesgo de la grasa excesiva en la parte media y sus consecuencias, como las enfermedades cardiovasculares».
El estudio aparece en una edición reciente en línea de la revista Human Molecular Genetics.
Las investigaciones anteriores hallaron que los ratones sin la proteína SHC1 son más delgados que los que tienen la proteína, según el comunicado de prensa.
Fuente: www.healthday.com