Con frecuencia, al finalizar el periodo de vacaciones, nuestro organismo parece no estar preparado para la vuelta al trabajo y la rutina, sino que necesita de otras vacaciones para descansar de las anteriores.
Con la llegada de septiembre vienen a la memoria el consumo excesivo de grasas, alcohol (se estima que lo aumentamos en un 30% con respecto al resto del año), alimentos calóricos y ricos en azúcares, el desorden en las comidas, la modificación en los horarios, … y sentimos que nuestro organismo necesita depurarse.
Los excesos durante el periodo estival pueden provocar que nuestro organismo se resienta afectando a la salud.
Además, la sobreexposición al sol más tiempo del que debiéramos produce consecuencias negativas en nuestra piel: manchas y alteraciones de la pigmentación, venas dilatadas, arrugas finas, piel áspera… signos que no sólo hacen que nuestra piel parezca mucho más envejecida sino que además pueden llegar a provocar enfermedades de mayor alcance.
Para luchar contra esos efectos, una de las soluciones más eficaces es el tratamiento de Rejuvenecimiento Fotodinámico, una técnica mínimamente invasiva que consigue resultados excepcionales en tan solo una sesión, suprime de forma selectiva los tejidos dañados por el sol y estimula la producción de colágeno, consiguiendo no sólo eliminar las lesiones precancerosas, sino mejorar la salud de la piel en textura y elasticidad. Otro tipo de manchas como las “hormonales” de las pieles jóvenes o las “seniles” de las pieles más maduras pueden tratarse con la tecnología láser Fraxel Dual.
Otro órgano que se ve especialmente afectado durante el verano es el hígado, clave para el correcto funcionamiento de nuestro cuerpo, trabajando en la transformación de los alimentos en energía, la neutralización de toxinas, la eliminación del alcohol y de todo tipo de sustancias tóxicas, la limpieza de la sangre, la producción de bilis (que ayuda a eliminar los deshechos y a descomponer las grasas). Se le atribuyen mas de 500 funciones y el mantenerlo en buenas condiciones es clave para prevenir enfermedades.
Los especialistas de la prestigiosa clínica de bienestar SHA Wellness Clinic aseguran que “los alimentos que ingerimos no sólo son nuestra principal fuente de energía sino que también proporcionan salud y bienestar a nuestro cuerpo. Lo ideal es mantener una dieta equilibrada y una actividad física constante durante todo el año, evitando excesos y altibajos”.
Por ello, es muy importante que al volver al día a día, corrijamos todos los excesos y malos hábitos, adoptando una serie de medidas que nos ayuden a reparar el organismo, evitando que aparezcan diversas patologías.
“Es fundamental seguir una alimentación sana, rica en frutas y verduras frescas, evitar el alcohol y el consumo excesivo de algunos fármacos”, recuerdan los expertos en nutrición y terapias naturales de la clínica SHA.
Además, es especialmente útil depurar el hígado al menos una vez al año o realizar un programa completo de detoxificación realizado y supervisado por nutricionistas y médicos que ayudarán a favorecer la eliminación de toxinas, eliminar grasa visceral y recuperar un estado de ánimo lleno de energía para afrontar la llegada del otoño.
El programa, de sencilla realización, puesto en marcha en un ambiente único de paz y tranquilidad, consiste en estar una semana cuidando mucho la alimentación y ayudando al cuerpo en su proceso de limpieza y desintoxicación, potenciando su capacidad autocurativa con diversas infusiones y zumos naturales, sesiones de hidro-colonoterapia, con una actividad física acorde y personalizada, y preparándolo para lograr al cabo de una semana una limpieza de los conductos biliares y la eliminación de residuos tóxicos acumulados, que merman la capacidad natural de órganos tan importantes para mantener una salud correcta, alcanzando una sensación de energía renovada y una mejoría general difícil de igualar.
Puedes ampliar esta información en: www.shawellnessclinic.es
